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Pine Barrens, la política y el plan que lanzó miles de conspiraciones

Parte del terreno sin desarrollar en el Parque Empresarial de Calverton. Foto de cortesía: Christy Hawkins

Este es el segundo artículo publicado dentro de la serie que examina la historia del lugar conocido como EPCAL, mientras el Ayuntamiento de Riverhead considera la venta del terreno vacante restante en la localización donde Grumman Aerospace construyó y probó los aviones militares para la Marina de los Estados Unidos desde 1956 a 1996. Consultar el primer artículo.

Pasaron cuatro años antes de que la legislación federal autorizara la transferencia de la Planta de Reserva Industrial de Armamento Naval en Calverton al Ayuntamiento de Riverhead en septiembre de 1994 y el actual traspaso de la propiedad.

Eso llevó más tiempo del previsto y muchas cosas sucedieron en ese período —algunas previstas y otras no.

Cuando Northrop Grumman cerró sus operaciones y se preparó para abandonar Calverton —algo que estaba programado que ocurriera a finales de 1995—, el ayuntamiento de Riverhead se dispuso a desarrollar un plan de reutilización para la instalación. La ley federal exigía que el ayuntamiento estableciera una comisión de planificación y desarrollo para supervisar el plan de reutilización. Después de emitir una petición de propuestas y considerar las respuestas, el ayuntamiento contrató en julio de 1995 la consultoría —con base en la ciudad de Nueva York— Hamilton, Rabinovitz & Alschuler para desarrollar el plan.

Mientras tanto, los funcionarios del Ayuntamiento de Riverhead tenían otro plan que les preocupaba mucho: el Plan Integral de Uso del Terreno de Central Pine Barrens.

El Plan de Pine Barrens fue requerido por la Ley de Protección de Pine Barrens L.I., en 1993 —una ley aprobada por la Legislatura Estatal después de cuatro años de litigios entre la Sociedad Pine Barrens en Long Island y los ayuntamientos de Brookhaven, Riverhead y Southampton. La demanda legal, presentada en 1989, fue eventualmente desestimada por el tribunal superior del estado, pero el tribunal, señalando que el área de Central Pine Barrens de L.I. había sido reducida a más de la mitad y se enfrentaba a continuas presiones de desarrollo — según se informó en la acción legislativa—, necesitaba un plan integral para abordar la conservación del importante recurso natural.

La Ley de Pine Barrens designó el Pine Barrens de L.I. y dividió la región en dos clasificaciones: el “área central de conservación” y el “área de crecimiento compatible.” La ley también creó la Comisión Central Pine Barrens y le otorgó dos años para producir un plan integral de uso del terreno. El plan debía ser aprobado por los tres ayuntamientos (Brookhaven, Riverhead y Southampton) antes del 15 de marzo de 1995, una fecha límite que luego se extendió a 30 de junio de 1995.

Cuando la legislatura estableció los límites de Pine Barrens en 2013, la Planta de Reserva Industrial de Armamento Naval en Calverton todavía era propiedad de la marina y Northrop Grumman seguía operando en el lugar. La ley estatal no podía afectar el uso de tierras federales. En 1994, todo eso cambió cuando ya era más claro que el Ayuntamiento de Riverhead sería el propietario del terreno, ya que las municipalidades están sujetas a regulación estatal.

Los restos del vuelo TWA 800, que explotó y se estrelló en el Océano Atlántico frente a la costa de East Moriches, para posteriormente ser reconstruido en la Planta Seis de la antigua instalación de Grumman en los años siguientes después de la tragedia. Foto: Informe NSTB

Los funcionarios de Riverhead no quisieron ceder el control sobre la reurbanización de la planta en Calverton a la Comisión de Central Pine Barrens. Intentaron y no consiguieron que los legisladores estatales enmendaran la Ley Pine Barrens para eximir la Planta de Reserva Industrial de Armamento Naval en Calverton. Los funcionarios del ayuntamiento negociaron la inclusión de varios artículos en el Plan de Pine Barrens: todo desarrollo económico futuro en el lugar se debía considerar como de “no desarrollo” a los efectos de la regulación por parte de la Comisión de Pine Barrens; reconocimiento de que se llevaría a cabo el desarrollo en el lugar; y un proyecto de desarrollo individual en el terreno que no requeriría presentar una revisión formal y/u obtener aprobaciones por parte de la comisión.

Pero no se equivoque: una batalla campal se desató durante el invierno-primavera de 1995. El ayuntamiento no solo estaba luchando por mantener la propiedad de Calverton fuera de la jurisdicción regulatoria de la nueva Comisión de Pine Barrens, sino que intentaba también aprovechar su ventaja de negociación para mover un límite establecido por la Ley Estatal de Ríos Silvestres, Escénicos y Recreacionales desde hacía más de una década, que acabaría esterilizando de manera efectiva una gran parte del terreno contra el desarrollo urbanístico.

Con el reloj acercándose a la fecha límite del 30 de junio —cuando el plan, a menos que fuera aprobado por los tres ayuntamientos, sería nulo— los funcionarios del ayuntamiento se plantaron en su decisión.

Se llegó a un acuerdo en el último momento. Sus términos fueron conmemorados en una carta el 21 de junio de 1995 por el “grupo de consenso” de Pine Barrens — que incluía a los patrocinadores legislativos de la Ley de Pine Barres, el senador estatal Ken LaValle y el asambleísta Thomas DiNapol, así como grupos medioambientales, promotores inmobiliarios y asociaciones de comerciantes, y la junta municipal de Riverhead.

“Los miembros del Grupo de Consenso, junto con [el director regional del DEC] Ray Cowen, acordaron unánimemente con el Ayuntamiento que el área de Calverton que se encuentra dentro de ‘la valla’ y en el área de crecimiento compatible debería ser desarrollado…” decía la carta. Tan sólo figuraba una excepción: alrededor de 410 acres fueron designadoscon el código de área de Pine Barrens.

La Junta Municipal de Riverhead, en su calidad de órgano de gobierno de Riverhead, votó unánimemente para aprobar el Plan de Pine Barrens en una reunión extraordinaria el 28 de junio de 1995.

¿Podría Six Flags establecerse en Calverton?

La empresa de consultoría Hamilton, Rabinovitz & Alschuler entregó su plan de obra maestro integral para el terreno de Calverton menos de un año después. Su visión era “un parque empresarial multiusos que tiene como núcleo un importante complejo industrial. Esta reutilización de las instalaciones existentes se ve aumentada con una asignación de terrenos que se basa en la emergente economía de ocio y turismo del East End.”

El plan maestro incluyó los siguientes componentes: un parque empresarial industrial (365± acres); un parque temático (524± acres); un parque deportivo (911± acres); un parque natural (938± acres); e infraestructuras (15± acres).

El parque empresarial reutilizaría los edificios existentes para una variedad de usos comerciales.

El distrito del parque temático estaría localizado en la parte noroeste de la propiedad y albergaría un “parque temático regional,” que constituiría posiblemente un parque temático de afiliación nacional como Six Flags. La pista de aterrizaje de 7,000 pies se utilizaría como estacionamiento para los visitantes.

En la parte este de la propiedad, al este de la pista de 10,000 pies, se encontraría el distrito del parque deportivo, donde un estadio deportivo de 6,000 a 8,000 asientos disponibles sería el uso principal, y con la pista de 10,000 designada como estacionamiento.

El área de parque natural abarcaría la zona central de pinos y el lago McKay, y además incluiría una parque comunitario y un campo de golf público.

En el plan se identificaron usos potenciales para incluir una incubadora de empresas, estudios de cine y producción, así como un complejo de pistas de carreras.

HR&A anticipó que el precio de venta del terreno para usos comerciales sería entre $25,000 y $45,000 por acre.

El 16 de julio de 1996, la Junta Municipal de Riverhead adoptó el plan de obra maestro integral para la Planta de Reserva Industrial de Armamento Naval en Calverton.

Al siguiente día, un Boeing 747 con destino a París (Francia) despegó de JFK, aproximadamente 12 minutos más tarde, el vuelo 800 de TWA explotó y se estrelló en el Océano Atlántico frente a la costa de East Moriches, matando a las 230 personas que iban a bordo.

Esa tragedia imprevista alteró los planes de Riverhead para el parque empresarial de Calverton. El gobierno federal ocupó la Planta Seis —de 325,000 pies cuadrados—, donde trajo los escombros del accidente aéreo para una investigación realizada por la Junta Nacional de Seguridad de Transporte y la Agencia Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en ingles).

Por un lado, mientras que la investigación puede haber retrasado la transferencia de la propiedad del gobierno federal al ayuntamiento de Riverhead, también condujo a un contrato de arrendamiento posterior a la transferencia entre los federales y la CDA que proporcionó al ayuntamiento un ingreso de alquiler fijo muy necesario que cubrió los costes de servicios y mantenimiento de la ciudad mientras examinaba las propuestas para el terreno.

Y estas propuestas comenzaron a llegar, mucho antes de que el ayuntamiento fuera propietario del lugar.

Próximo: ¿Cuáles fueron esas propuestas y cómo el ayuntamiento las gestionó?

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Denise Civiletti
Denise es una reportera veterana y editora local, una abogada y ex concejala de Riverhead Town. Su trabajo ha sido reconocido con numerosos premios, incluyendo un premio "escritor del año" de la Asociación de Prensa de Nueva York en 2015. Es fundadora, propietaria y coeditora de este sitio web. Correo electrónico Denise.