Un supuesto miembro de la pandilla “Bloods” (sangres), que disparó a otro hombre fuera del Teatro Suffolk el 26 de noviembre de 2016, fue sentenciado a 14 años de prisión tras declararse culpable en abril de un delito de intento de asesinato y otros cargos por delitos graves.
Jovan Bailey, de 31 años y residente de Medford, también se declaró culpable en mayo de dispararle a un hombre el 14 de enero de 2017 a las afueras de un bar en Oakdale. Bailey fue sentenciado ayer por el juez del Tribunal del condado de Suffolk, Stephen Braslow, a 14 años de prisión y cinco años de supervisión posteriores a su liberación.
Bailey se declaró culpable el 12 de abril de los cargos de Intento de Asesinato en Segundo Grado, un delito B; Uso Criminal de un Arma de Fuego en Primer Grado, un delito B; Asalto en Primer Grado, un delito B; y Posesión Criminal de un Arma de Fuego en Segundo Grado, un delito C. Se emitieron órdenes de protección para las dos víctimas.
“Este es un individuo peligroso y un presunto miembro de una pandilla, que repetidamente cometió actos de violencia sin sentido con armas de fuego y luego intentó evadir el cumplimiento de la ley al huir del condado de Suffolk,” informó el fiscal del distrito de Suffolk, Timothy Sini. “Gracias a la excelente colaboración entre nuestra oficina y nuestros compañeros en el Departamento de Policía del condado de Suffolk, el Departamento de Policía de Riverhead y el Servicio de Marshals de los Estados Unidos, ahora está cumpliendo una sentencia en prisión importante y se le hace responsable de estos crímenes.”
Bailey le disparó a una víctima dos veces en el pecho, fuera del Teatro de Suffolk, ubicado en East Main Street, el 26 de noviembre de 2016 a las 3:25 a.m. aproximadamente, según los fiscales. El 14 de enero de 2017, a las 03:05 a.m. aproximadamente, disparó una vez en la pierna a otra víctima, fuera del local Shakers Pub, en Oakdale, dijo la oficina de Sini en un comunicado de prensa la noche del miércoles. El vehículo en el que Bailey huyó de la escena del tiroteo, fue localizado por el Departamento de Policía del condado de Suffolk. Su propietaria, Jessica Hardy, de 29 años y residente de Bellport, fue arrestada posteriormente esa mañana por un delito de posesisón ilegal de una pistola semiautomática, una Glock 9 milímetros, descargada y que fue encontrada en el automóvil, dijeron los fiscales.
Un análisis forense del arma mostró que coincidía con la evidencia recuperada en las dos escenas de tiroteos y el análisis de ADN relacionó tanto a Hardy como a Bailey al arma, explicó la oficina del fiscal del distrito. Una investigación, realizada por el Departamento de Policía del condado de Suffolk, el Departamento de Policía de Riverhead y la Oficina del Fiscal de Distrito del condado de Suffolk, sobre los dos incidentes, identificó a Bailey como el tirador.
Después del segundo tiroteo, Bailey huyó del estado, según el fiscal del distrito. Fue arrestado en Massachusetts el 7 de marzo de 2017, por la Unidad de Fugitivos Regional de Nueva York /Nueva Jersey del Servicio de Marshals de los Estados Unidos y fue traído de vuelta al condado de Suffolk para su enjuiciamiento.
Hardy se declaró culpable el 23 de mayo de 2018, de Posesión Criminal Tentativa de un Arma de Fuego, un delito menor. Fue sentenciada el 25 de julio por el juez Braslow a 3 años de libertad condicional.