Después de dos semanas de juicio sin jurado, el juez del Tribunal Supremo del Estado, Fernando Camacho condenó hoy a Christopher O’Brien, acusado de conducir bajo los efectos del alcohol, por homicidio involuntario en segundo grado al conducir borracho y matar a un hombre de Aquebogue en una colisión frontal, según informó el fiscal del distrito del condado de Suffolk, Thomas Spota. O’Brien conducía en el carril contrario, en dirección este por una vía que se dirigía al oeste a través de la autopista Sunrise en el año 2015.
El juez Camacho absolvió al hombre de Port Jefferson Station de un cargo de homicidio en segundo grado por indiferencia moral agravada y múltiples cargos de imprudencia temeraria.
Además del cargo por homicidio involuntario, el juez Camacho condenó a O’Brien por homicidio vehicular en segundo grado: conducir en estado de ebriedad, conducir mientras se encontraba incapacitado por una droga (cocaína), conducir mientras se encontraba incapacitado por los efectos combinados del alcohol y la cocaína; así como también por conducción temeraria.
La víctima, Thomas D’Eletto, de 57 años, conducía su Toyota Corolla para dirigirse al trabajo en el condado de Nassau; cuando falleció en el accidente de Yaphank.
Las pruebas realizadas en el laboratorio criminal del condado de Suffolk reportaron que el nivel de alcohol en la sangre de O’Brien era de .17, más del doble del umbral legal de .08 en los casos de conducción bajo los efectos del alcohol. Durante el juicio en Central Islip, algunos testigos declararon que varios vehículos se vieron obligados a abandonar la carretera en la mañana del 23 de diciembre de 2015, para evitar chocar con O’Brien.
O’Brien se enfrentará a un máximo de hasta 15 años en prisión, cuando sea sentenciado el próximo 30 de noviembre.