Ocho personas tienen algo más que agradecer este Día de Acción de Gracias: el don de la audición.
La Fundación para Visión y Sonido, los centros de audición McGuire y audífonos ReSound se han unido para celebrar la octava edición anual del “Día de la Audición por Navidad,” para ofrecer audífonos de última generación, pruebas, adaptaciones y un año gratis de servicio para personas con discapacidad auditiva que necesiten asistencia.
“Los beneficiarios serán elegidos por mi personal,” dijo David Carr, propietario de los Centros Auditivos McGuire, que cuenta con 10 centros por todo Long Island, incluyendo Riverhead y Greenport, así como también la ciudad de Nueva York.
“Hay personas que se quedan atrás,” dijo, para quienes los dispositivos, que cuestan 5.000 o 6.000 dólares al por menor, están fuera de su alcance económico. “En el pasado, ayudamos a mamás y niños que tenían problemas auditivos. Gastaría más de 40.000 dólares en audífonos para sus niños.”
Se adaptaron nuevos audífonos para cinco personas el sábado en la oficina de McGuire en Riverhead.
Entre ellos se encontraba Paul Moore de Riverhead, quien no podía contener su alegría cuando el audiólogo de McGuire insertó el audífono en sus oídos.
Sonriendo de oreja a oreja, Moore no dejaba de secar sus lágrimas de alegría, que no dejaban de correr.
“Esto es hermoso,” dijo efusivamente. “Me encanta. Ha pasado mucho tiempo,” dijo Moore.
Igual que Moore, muchas personas con discapacidad auditiva dependen de leer los labios o incluso lenguaje de signos. Algunos simplemente se recluyen, es un problema muy común entre las personas de la tercera edad, comentó el fundador de la Fundación para la Visión y Sonido, Mitch Shapiro de Smithtown.
Los programas de la fundación “Help America Hear” (Ayudar a America a Oír) fue destinado en un principio a jóvenes, para ayudarles a adquirir independencia, dijo Shapiro. “Ahora vemos la gran necesidad que tienen las personas de la tercera edad.”
“Es una industria muy difícil,” dijo Carr, quien ha servido como miembro residente de la junta directiva de la fundación para la Visión y Sonido desde 2010. “Los instrumentos son caros y hay un estigma relacionado, especialmente entre la población de la tercera edad. Pasamos más tiempo en asesoramiento, trabajando para romper con el rechazo.”
Los dispositivos de alta tecnología de hoy en día son computadoras en miniaturas, según dijo Carr. “Están preprogramadas para las necesidades de un persona en particular, con una adaptación basada en las preferencias de la persona.”
La fundación sin ánimos de lucro recauda fondos con actos benéficos como un torneo de golf, noche de póker y apoyando los clubes rotatorios, Shapiro es miembro del rotatorio de Smithtown. Éste año, el rotatorio de Riverhead le hizo entrega a la Fundación para la Visión y Sonido de una donación de 3.000 dólares. La presidente del rotatorio Angela Reese es una gran defensora de la organización y la escogió para ser uno de sus “proyectos como presidenta”, dijo el presidente electo del club Daniel Lanieri, quien presentó a la organización un cheque ceremonial el sábado.
Shapiro, un orador motivacional y comediante, sabe lo que es ser privado de dos de tus cinco sentidos. Él vive con el síndrome de Usher, el principal responsable de su sordoceguera.
“He llevado audífonos por 50 años y ahora tengo dos implantes cocleares,” dijo. Su pérdida de visión le ha impedido ver objetos, colores o leer. Su perro de guía , Sammy, de 8 años, lo acompaña y lo guía en su vida cotidiana.
“Ser ciego y sordo no pone en peligro la vida, sin embargo te cambia totalmente la vida,” comentó en un comunicado. “Una de las cosas más importantes que he aprendido a través de mi experiencia personal es que la única forma de avanzar… un paso a la vez.”