Varios carteles de la campaña al congreso del demócrata Perry Gershon fueron marcados con las frases “BABY KILLER” (Asesino de Bebés) y “GAY LOVER” (Amante de homosexuales) y aparecieron en distintos lugares del Primer Distrito del Congreso, lo que llevó a una organización de derechos civiles de Long Island a exigir que los incidentes sean investigados como delitos de odio.
LGBT Network, con sede en Woodbury, también exige al actual congresista, el representante republicano Lee Zeldin, que denuncie públicamente las acciones presuntamente emprendidas por los partidarios del candidato republicano.
“Los partidarios del congresista republicano Lee Zeldin han mostrado sus verdaderos colores al marcar los carteles con una retórica anti-gay,” comentó el presidente de LGBT Network, David Kilmick.
“No han transcurrido ni 72 horas desde los ataques antisemitas más mortales en la historia de los Estados Unidos contra la comunidad judía y es inconcebible que estos carteles que exhiben odio hacia la comunidad LGBT aparezcan por todo el condado de Suffolk,” dijo Kilmick en una declaración emitida el martes por la mañana.
Durante el fin de semana, comenzaron a aparecer denuncias sobre estos carteles pintarrajeados en las redes sociales. Un portavoz de la LGBT Network dijo el martes por la mañana que no estaba seguro de cuántos carteles marcados se han reportado, pero él personalmente conoce a varias personas que los han recogido en la carretera.
“Este incidente es la continuación de un ataque violento de los candidatos republicanos a la comunidad LGBT en los últimos meses,” comentó Kilmick.
“Es imperativo que el congresista Zeldin denuncie de inmediato estos carteles llenos de odio y que cese de inmediato esta táctica que incita a la violencia y haga que personas [inocentes] resulten heridas o muertas,” dijo.
“No tenemos ni idea de quién hizo esto, pero deberían detenerse de inmediato,” dijo el martes el director de comunicaciones de la campaña de Zeldin, Chris Boyle.
“También hemos estado lidiando durante varias semanas con carteles de ‘Zeldin para el Congreso’ que han sido pintarrajeados robados de propiedad privada,” explicó Boyle.
“La violencia política y el odio no tienen cabida en nuestro discurso político. Si se trata de vandalizar los carteles políticos, o de atacar a personas con opiniones diferentes a las suyas, las diferencias se deben resolver en las urnas, no con odio y violencia. Quienquiera que sea responsable debe asumir la responsabilidad,” comentó Boyle.
“La incitación al odio no tiene lugar en Estados Unidos, especialmente en campañas políticas,” dijo el candidato demócrata Gershon en una declaración el martes por la mañana.
“La conversación con los votantes debe ser sobre ideas para mejorar sus vidas. Estoy orgulloso de apoyar a las mujeres en la lucha por el derecho a permitirles elegir lo que es mejor para sus propios cuerpos, y estoy orgulloso de apoyara la comunidad LGBTQ en la lucha por la igualdad,” dijo Gershon.
“Este no es un tema partidista, es humano. Reducir la incivilidad es el único camino constructivo hacia el futuro en Long Island y el país,” comentó.
“Insto a Lee Zeldin a unirse a mí para condenar la violencia basada en el odio, la intolerancia y el vandalismo relacionado, donde sea que ocurra, y quienquiera que la perpetre.”
Boyle señaló que la campaña de Zeldin publicó una condena de la acción en su página oficial de Facebook el lunes. Pero la declaración de Zeldin se unió a la condena de un presunto asalto por parte de un ‘miembro del personal de Gershon’ de un estudiante universitario que le hacía una pregunta al candidato. Con ello, la campaña compartió un vídeo de YouTube sobre el incidente, publicado el 24 de octubre por la Federación Universitaria de Republicanos en Nueva York. En el vídeo se muestra una mujer que camina con Gershon golpea lo que parece ser un micrófono cuando están saliendo de un edificio.
El director de comunicaciones de Gershon, Tim Minton, dijo que la mujer en el vídeo era la esposa de Gershon, no una empleada. Zeldin ha estado pagando ‘reporteros con cámaras, hasta siete a la vez, para que sigan y hostiguen a Perry y su familia dondequiera que van,” comentó Minton. “El único propósito es crear un momento de [atención] en Internet, algo que puedan usar para desviar la atención de las cosas que preferirían no discutir, como estos carteles.”